Los días siguen pasando y muchos argentinos que viajaron al exterior por trabajo o de vacaciones todavía siguen varados. El dinero para comprar pasajes y subsistir se les agota, pero no pierden las esperanzas, a pesar de que se sienten abandonados.
Por Marcelo Riega // De Nuevo Día
Desde que estalló la pandemia del COVID-19 y el Gobierno restringió el ingreso al país, la cantidad de argentinos varados en el mundo fue creciendo y con ellos sus problemas de sustento económico. Todos los días llegan a las embajadas y consulados argentinos en el exterior cientos de cartas o mails con reclamos por ayuda económica. Gente que se quedó sin trabajo en el exterior, algunos que viven en las calles, otros son sustentados por las iglesias del lugar en que quedaron varados y muchos que no tienen siquiera los medicamentos necesarios para subsistir.
Juliana Fernández Belloni tiene 25 años y en agosto del año pasado viajó a Francia para un intercambio cultural con duración de un año. Ella se encuentra en el este del país europeo, precisamente en Estrasburgo, donde hace de niñera en la casa de la familia del programa cultural, donde cobra un sueldo muy inferior a un sueldo mínimo. En julio su contrato se vence y en agosto se termina su visa de trabajo.
La suarense desde marzo está intentando volver, pero desde cancillería no obtiene respuestas, por eso está moviendo cielo y tierra buscando soluciones, antes de quedarse en la calle. Juliana dialogó con Nuevo Día donde cuenta como está viviendo este momento tan difícil, detalla cómo han sido sus últimos meses en Francia y como han manejado el virus.
- ¿De qué manera llegaste a Francia?
- Estoy desde agosto del año pasado. Actualmente en Estrasburgo, que se encuentra al este en el país europeo. Me vine a través de un intercambio cultural, mediante un programa que yo trabajo de niñera, vivo en la casa de la familia que se anotó al plan, donde me pagan un sueldo y me dan la posibilidad de mejorar mi idioma. Las cosas son difíciles acá y justo termina mi contrato en julio, porque cuando uno se anota a esta experiencia puede elegir entre seis meses a un año.
INICIOS DE CORONAVIRUS
- ¿Cómo tomaron el virus desde sus comienzos?
- Comenzó todo esto en febrero, que se nombra que hay una enfermedad, pero le restaron importancia como se hizo en Argentina en su momento como en todo el mundo, suponiendo que era solo una gripe viral y que no tenía más del 3% de mortalidad. Por eso no se le prestó la atención que merecía la situación.
Por ejemplo yo en febrero me fui de vacaciones, tomé vuelos y en los aeropuertos no había ningún tipo de control. Pasé por Viena, Ámsterdam, luego ya volví para donde resido, pero lo más curioso es que me la pasé yendo en colectivo, aviones, dormí en hostel y paseé por todos lados sin ningún tipo de problema.
Luego cuando volví se empezó a complicar la situación, porque se habían encontrado con varios casos en París, entonces se habló de una cuarentena administrada, donde se iba a tratar de que saliéramos pocas veces a la calle, que los restaurantes como el epicentro cerraran por ser lugares que atraen a grandes conglomeraciones y entonces de un día para otro se dio en confinamiento total.
- ¿Cuál fue el momento donde se desató todo?
- El gran problema que hubo en Europa es que el virus se esparció muy rápido porque había muchas personas asintomáticas y eso produjo un gran esparcimiento del mismo en tiempos récord. Cuando ser empezó a ver que había muchas personas contagiadas, principalmente en Europa occidental, salió Macron (presidente francés) a decir que se había equivocado por no tomar una determinación antes. Decidió cerrar todo y cada dos semanas se fue ampliando la cuarentena.
- ¿De qué manera manejaron el sistema educativo?
- En el lugar que me toca estar es una de las principales zonas rojas, donde en algunas escuelas comenzaron las clases, pero en general van a volver las primeras semanas de junio, donde sería el último mes de clases, ya que tienen un calendario contrario al que lleva Argentina. Lo que tiene que ver con los maternales y universidades, no comienzan por lo menos hasta septiembre, que sería donde arranca un nuevo año lectivo. Francia se salvó en un principio de contagiarse en grandes masas porque a diferencia de Italia o España, no tiene una población tan añeja.
LOS PROBLEMAS
- ¿En qué momento comenzó tu preocupación o la idea de volverte a la Argentina?
- Me pasó que en febrero, cuando me llama mi papá avisándome de que se rumoreaba que se iban a cerrar las fronteras y mi familia no quería que me quede en el exterior sin saber en qué momento podía volver. Al principio imaginé que no era tan grande, pero la locura me agarró en los primeros días de marzo cuando decidieron cerrar las fronteras tanto terrestres como aéreas.
En ese momento me comuniqué con la Embajada para rever mi situación, sabiendo que en julio terminaba mi contrato de trabajo y ya tenía un vuelo programado para volver en esos días, sabiendo que en los primeros días de agosto se me vence la visa de trabajo.
Luego de esperar como un mes a que me respondan, me ofrecieron un vuelo que salía 4000 euros, es decir, una locura y los vuelos que estaba ofreciendo Aerolíneas Argentinas salían alrededor de 60 o 70 mil pesos y la verdad se me hace imposible pagar eso.
- ¿Cómo cayó el hecho de romper el vínculo a las personas con las que convivís?
- En cuanto a la familia con la que estoy, al principio no les gustó la idea de que me vaya porque tengo un contrato que cumplir. Pero luego de asesorarme les expliqué que no podía estar viviendo todo el confinamiento lejos de mi país y que si no me volvía antes nadie podía asegurarme de volver a la Argentina. Entonces me dicen que sí, pero ahí comienza mi problema con la Embajada y aerolíneas.
Mi idea por un momento fue ir a España, a partir de ahí tomarme un vuelo de repatriación. Pero el consulado de ese país me recomendó no hacerlo porque estaban cerrando todas las fronteras del país y de esa forma me iba a terminar quedando varada como tantos argentinos. Me iba a volver con Iberia, pero nunca me dieron una cierta respuesta, sino que el vuelo no era prioridad para este momento.
- ¿La Embajada te dio alguna solución?
- Desde la Embajada siempre fue la misma respuesta, el día que tuviesen noticias me iban a avisar pero eso nunca pasó, porque lo único que me ofrecieron fue un vuelo imposible de pagar. A lo único que hacía alusión era que hablé con mi familia, amigos que me puedan pasar dinero y eso es lo único que me respondieron.
Una vez por semana trato de comunicarme para tener noticias y siempre me dicen lo mismo, no les importa el hecho de que me quede sin visa de trabajo, lugar para vivir o dinero. Encima les planteé que si mi familia decidiría enviarme toda esa cantidad de dinero se tendrían que endeudar y como si fuera poco pagar un impuesto del 30%, que en definitiva es imposible llegar a esos números.
Encima el problema se agravó cuando sale el decreto de la NAC, que dice que no se pueden comprar boletas desde Argentina para volver y que cierran las fronteras. Una vez que sucede eso, me comuniqué instantáneamente con el consulado para plantearle qué como no podía volver a Argentina, le planteé que me den una solución porque difícilmente aguante hasta septiembre. Donde un sueldo mínimo es de 1100 euros y yo estoy ganando 350 euros. Entonces una vez que se termine mi trabajo no voy a poder mantenerme.
Yo sé que por ahí puedo ahorrar en estos meses que me quedan para si llega el caso aguantar un mes, pero que va a pasar con los argentinos que están en París, Italia, Alemania, muriéndose de hambre porque no pueden volver. Por eso me dio mucha bronca que en el último discurso el Presidente no hablara de los argentinos que estamos varados en el exterior.
- ¿El pasaje de vuelta original sirve para volver?
- En realidad si este decreto de la NAC se modifica y dejan entrar repatriados a la Argentina antes de julio, podría volver. Pero en ese caso tengo que ver si yo puedo entrar a España porque mi vuelo sale de ahí. El problema es que este país entró en la etapa de desconfinamiento y la situación empeoró, por lo tanto extendieron el cierre de fronteras hasta el 12 de junio, que puede ser modificable.
En definitiva, dependo de lo que se resuelva con el decreto de la NAC, tanto con lo que suceda con las fronteras europeas. Porque está la posibilidad de comprar un vuelo pero que no te dejen subir. Es difícil manejarse por acá porque nadie te explica cómo hacer las cosas, si entiendo que para poder volver tengo que sacar muchísimos papeles para explicar que soy Argentina y que quiero volver a mi país.
Pero en verdad la comunicación no existe, ya que no sé si en el caso de que pueda pasar España tenga que hacer una cuarentena especial para poder recién viajar y/o cuando llegue a Argentina, por eso insisto que todo es muy confuso.
Ya no sé dónde llamar, porque te ponen miles de números para llamar de atención, los cuales uno llama y nadie te atiende. Te puedo asegurar que entré a la página de la Embajada Argentina en París con los diez o quince números que te ponen, llamé a todos donde la respuesta fue negativa. Siendo que la única vez que me atendieron fue porque a una niñera la llamaron diciendo que se estuviesen preparando porque posiblemente haya vuelos pronto y conmigo nunca nadie se comunicó ni para decir que no había nada.
- ¿Hay muchos argentinos en la zona donde residís?
- Acá en Estrasburgo la verdad que no hay, lo que sí que hay muchísimas personas en París. A veces pasa que veo que latinoamericanos se confían porque tienen sus vuelos ya sacados con antelación, piensan que van a volver y luego se enteran que los reprogramaron sin avisarles o que directamente están cancelados. O peor que hay chicos que no están al tanto que las fronteras de sus países están cerradas, viajan directamente y se encuentran que no pueden entrar a su país, te hacen parecer inmigrantes.
- ¿Qué opina tu familia con todo esto que te está pasando?
- Sé que mi papá está todo el día averiguando todo lo que se puede hacer, aunque tampoco ha encontrado muchas respuestas. Sé que mi madre estuvo pensando en sacar un crédito en el banco para buscar alguna solución, porque cancillería te recomienda con los bancos para ampliar tu posibilidad de sacar más dinero. La cual a mí no me interesa porque yo soy estudiante no puedo sacar más de tres mil pesos. Mi familia está pensando y viendo si verdaderamente voy a necesitar plata para pasar este tiempo, aunque gracias a Dios pude ahorrar algo, ya que puedo tener unos 500 euros, sabiendo que si me pasa algo, un mes voy a poder comer.
Ellos están muy desesperados porque la situación parece muy grave, por más que acá empiece el desconfinamiento. En Argentina recién empieza todo, por eso mi familia está muy alterada por lo que pueda a llegar a pasar y si es que pueda regresar o no.
- ¿Hay alguna alternativa en el caso de que no puedas volver al país?
- En el caso de que no pueda volver estamos tratando de llegar a un acuerdo con la familia con la que estoy viviendo para poder quedarme ahí un tiempo. Así que en este tiempo lo único que me queda es seguir todos los días rogando a la Embajada que me dé una solución, porque en el último tiempo de los únicos lugares que salen vuelos de repatriación son de Italia, España y Estados Unidos, es decir, del resto de los países no hay noticias o somos inexistentes para Argentina. Por lo que me han comentado y he leído solo salieron dos vuelos de repatriación desde que comenzó todo esto desde Francia, es lamentable.