Se trata de un Programa de emergencia financiera, creado por el Gobierno Nacional, para asistir a las provincias, destinado a compensar la caída de la recaudación por el coronavirus. No habrá excepciones del aislamiento que será de carácter nacional. Los fondos se distribuirán conforme a los porcentajes previstos en la ley de coparticipación y también a través de préstamos puntuales que solicite cada Gobernador.
Ante la caída de la recaudación, Alberto Fernández anunció -en videoconferencia- a los mandatarios provinciales, incluído Horacio Rodríguez Larreta, que la Nación saldrá en auxilio de las provincias para atenuar el impacto del aislamiento social obligatorio más allá de las actividades que ya fueron exceptuadas como comercio exterior, la obra privada de infraestructura energética, además de las vinculadas con la producción, distribución y comercialización forestal y minera, entre otras.
Sin embargo, y más allá del programa de emergencia financiera anunciado a los Gobernadores, no todas fueron buenas noticias para las provincias. El Gobierno ya decidió que tampoco se levantará el aislamiento social obligatorio en los Distritos donde aún no se detectaron casos de coronavirus, es decir, Catamarca, Chubut y Formosa; pero también San Juan, que cuenta con un único caso diagnosticado, así como Salta y La Pampa con tres, que tenían expectativas de una apertura mayor de la actividad económica a partir del próximo lunes. El confinamiento volverá a ser declarado a nivel nacional.
Adultos mayores y vulnerables
El Presidente también analizó, junto a los Gobernadores, un Protocolo para adultos mayores y adultos vulnerables que se implementará a partir del lunes. Este sector de la población seguirá con el confinamiento obligatorio pero se flexibilizaría el régimen de contacto con las familias de acuerdo a un procedimiento de higiene y salubridad previo que incluirá, como sugerencia, el uso de máscaras para prevenir contagios en mayores de 70 años. El protocolo surgió a partir de una propuesta de Horacio Rodríguez Larreta que Alberto Fernández impulsó junto a Axel Kicillof y Ginés González García.
Salir de a poco del aislamiento
Si bien el listado no está definido, desde Presidencia explicaron que “el principal parámetro va a ser el transporte público. Se van a liberar aquellas actividades que no saturen ni colectivos ni trenes ni subtes donde queremos evitar que se acumule gente”. Un ejemplo microeconómico para ilustrar el criterio es que no se permitirá el regreso al trabajo de empleadas domésticas. Las clases no tiene fecha de retorno y en el Gobierno no descartan adelantar las vacaciones de invierno a mayo y salvar así, dos semanas de calendario escolar.
Participaron de la comunicación virtual los gobernadores de Chaco, Jorge Capitanich; de Chubut, Mariano Arcioni; de Córdoba, Juan Schiaretti; de Corrientes, Gustavo Valdés; de Entre Ríos, Gustavo Bordet; de Formosa, Gildo Insfrán; de Jujuy, Gerardo Morales; de La Pampa, Sergio Ziliotto; de La Rioja, Ricardo Quintela, y de Misiones, Oscar Herrera Ahuad. También estuvieron presentes los mandatarios de las provincias de Neuquén, Omar Gutiérrez; de Río Negro, Arabela Carreras; de Salta, Gustavo Sáenz; de San Juan, Sergio Uñac; de San Luis, Alberto Rodríquez Saá; de Santa Fe, Omar Perotti; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; de Tucumán, Juan Manzur; de Catamarca, Raúl Jalil; de Santa Cruz, Alicia Kirchner; de Tierra del Fuego, Gustavo Melella; de Mendoza, Rodolfo Suárez, y el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Rodríguez Larreta.
El Presidente -que ya se había reunido con los 24 gobernantes el 19 de marzo pasado en Olivos-, horas antes de anunciar el aislamiento obligatorio, les confirmó que la cuarentena dispuesta a partir de la pandemia de coronavirus “va a seguir después del 13 de abril” con carácter nacional. Antes de la cumbre virtual, el Presidente y Wado de Pedro habían recorrido el Centro Sanitario en Tecnópolis donde el Gobierno nacional montará uno de los espacios para atender casos leves de Covid-19, con disposición de 2.500 camas no hospitalarias en una primera etapa, en el marco de un plan integran que prevé la disposición de más de 16 mil para el AMBA.